La Esperanza Rebelde – El Plan B

Jornadas del Plan B en Madrid. La Esperanza Rebelde.

Se propone, en resúmen, lo siguiente.

Cuatro puntos.

Uno, crear un movimiento social ciudadano paneuropeo para luchar unidas en Europa en todos los frentes, social, derechos, TTIP-TISA, diversidad funcional, trabajo, sanidad, educación, vivienda, represión, crisis de migración.

Dos, desobediencia civil e institucional a las leyes injustas.

Tres, la deuda NO se paga, nada de negociar pagar más despacio, NO se paga y punto.

Cuatro. El Plan B o es Plan F, o es Feminista, o no será.

La Rebelión Democrática de los Pueblos está aquí.

La Esperanza Rebelde ha nacido.

http://planbeuropa.es/

VÍDEO: Acto de cierre del Plan B para Europa en Madrid

adoranser

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La Esperanza Rebelde – El Plan B

Software Libre y la Nueva Economía

La promoción del software libre debe ir acompañada por la plasmación de una economía no monetarista, no financiera, basada en los conceptos de función y utilidad, como medida de transacción y de tasación, en lugar del valor de las cosas o servicios, como en la economía actual, y como objetivos la maximización de esa función, funcionalidad y utilidad, uso de las cosas y servicios, en lugar de buscar la maximización del beneficio económico y de la acumulación de valor, o de deuda, como la actual, unidos, estos objetivos de una nueva economía, al íntimo e inseparable objetivo de la disponibilidad, de la accesibilidad generalizada de todas las personas a estos bienes y servicios para hacer uso de la función los mismos, ejecutar su utilidad y aprovechar su uso.

El software libre puede ser, a la vez que usuario de esta nueva economía, promotor estructural de la misma.

Puede ser una de las piezas claves en el desarrollo de esta nueva economía.

A escala global.

Esta nueva economía debe tener como ejes motores, al igual que el software libre, el bien común, el conocimiento colectivo, la compartición de ideas, la cooperación, en lugar de la competitividad. Tener en cuenta la valoración de las personas por el conocimiento que poseen y aportan (dinámicas generosas), en lugar de por el capital y bienes que poseen y que se quedan (dinámicas egoístas), y el prestigio de las personas y colectivos medidos por los mismos índices, antitéticos a los de la sociedad actual. Esto también supone un cambio radical de valores.

Esta nueva economía y este nuevo tipo de reglas y valores, traerían, como consecuencia, de manera automática, el desarrollo y proliferación de sociedades basadas en estos principios, por el mismo diseño estructural y por las mismas dinámicas y desarrollo de este nuevo tipo de economía y modelo de sociedad.

Sociedades en las que el software libre sería una de las principales maneras de gestionar el conocimiento colectivo, el bien común, los servicios a la sociedad, el acceso de todas a todo, la distribución justa de los bienes de este mundo y la materialización de sociedades justas y pacíficas, en las que sería agradable y alegre vivir, en lugar de suponer un ansia y un estrés insoportables para el ser humano.

Sociedades en las que, por diseño, se potenciara y primara el desarrollo de individuos y colectividades en toda su capacidad y posibilidades, no estando sometidos a dinámicas de explotación y exclusión, sino a dinámicas de cooperación, inclusión y respeto, respeto a todas y a todos, respeto a las minorías y a las y los más débiles, ya que al sustituir el motor de la competencia, de la competitividad, por el de la cooperación, el aporte, no se mediría a los seres por lo que rinden sino por lo que aportan, que no es lo mismo. No se mediría a las personas por lo que «valen» sino por su potencialidad de desarrollo y su aporte a la sociedad.

El aporte de los individuos a la sociedad no tiene por qué ser económico, material ni técnico. Puede ser afectivo, inmaterial, aporte de conocimientos y de saberes y aporte de ayuda y solidaridad. Estos aportes que indico, no tangibles, en las sociedades actuales se regulan valorándolos con referencia a patrones tangibles: el dinero, su valor monetario y financiero, con lo cual prostituyen la esencia misma de esos valores intangibles y su devenir, obligándoles a desarrollarse de manera no deseada, bastarda, impropia, al tener que dar cuentas medidas por un patrón monetarista y financiero, material, tangible.

Sin embargo, en una sociedad como de la que hablo, estos aportes intangibles serían evaluados con referentes propios de estos mismos aportes, referentes no diseñados desde el punto de la medición del valor (tangible) sino desde el punto de vista de la evaluación de la función que ejercen y de su desarrollo: todas y todos necesitamos cariño, afecto, cuidados, aprender y llegar a tener criterio propio, etc. Es necesario recibir y dar todas estas cosas por la función primordial que ejercen en el desarrollo del individuo y de la sociedad y también maximizar la función de estos aportes, haciendo, a su vez, generador y generadora, a cada una de nosotras y nosotros, de estos aportes para los demás. Es decir, el que recibe, también da y eso amplifica de manera exponencial la propagación de estos aportes necesarios.

No todo se puede medir, pero todo se puede evaluar. Uno de los errores más graves de las sociedades actuales, de las estrategias empresariales y también gubernamentales es querer medirlo todo para poder evaluarlo todo. Bien. Su error, craso y muy grave error, es el siguiente: no siempre es necesario medir para evaluar, pero lo que sí es siempre necesario es poder evaluar. Lo que queremos todas y todos en el fondo es poder evaluar lo que hacemos y nos han dicho que la única manera de evaluar es medir. Mentira. Se puede evaluar sin medir. Y no siempre se puede medir pero siempre se puede evaluar.

Para estos aportes intangibles hay que establecer maneras de evaluación no-métricas, no-medicionales, sino, más bien percepcionales, referentes a la percepción. Esto se asocia más con la idiosincracia propia del ser humano, de las personas, que las métricas tradicionales.

Y en estas nuevas sociedades, ergo economías, no monetaristas, no financieras, en las que la base no es el valor sino la función y las que el objetivo no es incrementar valor (acumular) sino incrementar función (disponibilidad y continuidad),  funcionalidad, entendida funcionalidad en un sentido amplio que incluye disponibilidad, accesibilidad generalizada de todos a todo, y continuidad en el tiempo de los servicios prestados, tiene todo el sentido tender incluso a primar aportes intangibles evaluados de maneras no-métricas, sino percepcionales, que darían como lugar, a una sociedad infinitamente más humana, agradable, amable, vivible, que las sociedades en las que vivimos ahora.

El sofware libre está transido de toda esta filosofía que explico. Todo esto, es la base filosófica del sofware libre, más allá de consideraciones técnicas y meramente relativas a los sistemas de información, entendiendo, entonces, el software libre como una de las bases, columna vertebral, pilar y cimiento, a la vez que gestor, desarrollador y propagador, motor, de estas nuevas sociedades y economía.

No serían ya más las sociedades o sociedad de la información sino Las Sociedades del Conocimento, La Sociedad del Conocimiento, entendido conocimiento tal como lo predica la filosofía del software libre: conocimiento colectivo para el bien común. Entendido conocimiento como sabiduría, no como expertise, tal como se entiende actualmente.

Ya no queremos más expertos, ahora necesitamos a sabios.

Esto tiene que ver también con el Ecofeminismo.

Y ya no serían más los sistemas de información sino los Sistemas del Conocimiento. Los Gestores del Conocimiento. Los Sistemas del Saber, los Gestores del Saber. Los Sistemas de la Sabiduría o los Gestores de la Sabiduría.

Sería pasar de las sociedades anti-humanas a las sociedades humanas, de las sociedades diseñadas contra el ser humano a las sociedades diseñadas para la promoción de la persona, entendido la persona en su conjunto colectivo, individual y en unión coherente con la naturaleza, de la que es parte inseparable la persona, el ser humano.

De las sociedades de la tristeza endémica, infelicidad, a las sociedades de la alegría generalizada, la felicidad.

Las Sociedades del Conocimiento. Las Sociedades del Saber. Las Sociedades de la Sabiduría. Las Sociedades de la Felicidad.

Es posible, es el momento y lo tenemos que hacer.

Entre todos y todas.

Adolfo Ranero alias adoranser

Software Libre y la Nueva Economía

La Inteligencia Colectiva frente a la Tiranía de los Imbéciles

El otro día, en un artículo que escribí, denuncié que la sociedad en la que vivimos se ha convertido en La Tiranía de los Imbéciles. Argumentaba que esta sociedad, en la que prima la imagen, ha aupado a auténticos idiotas al poder en todos los ámbitos públicos y privados, que nos están destruyendo y que era necesario y urgente sustituir a esos ineptos por gente inteligente, capaz y competente, que desarrolle esos mismos puestos de responsabilidad de una manera efectiva, eficaz, ética y técnicamente correcta.

Pues bien. Reflexionando hoy, voy más allá. Puede que ni siquiera así se solucionaran las injusticias estructurales y el malfuncionamiento de este sistema que nos acogota a todas y a todos. Puede que el problema esté en la misma estructura jerárquica de este sistema y de todos los sistemas sociales y políticos que se han implementado hasta la fecha.

Siempre se ha entendido la inteligencia como un concepto casi exclusivamente personal, en la que algunos tienen la suerte de ser más listos y otros, simplemente, se joden. Siempre se ha dicho “qué inteligente es pepito o pepita, podrá hacer lo que quiera en la vida”. Siempre se ha entendido la inteligencia como una especie de lotería genética que, o te tocaba o no te tocaba.

Y hablando desde el punto de vista exclusivamente personal, biológicamente es cierto. Las investigaciones de las últimas décadas han demostrado que la inteligencia es genética. Otra cosa es que la cultives o no, claro. Y todos y todas tenemos mucho más que el mínimo necesario de inteligencia para desarrollar una vida plena y feliz. Lo que pasa es que algunas y algunos tienen más.

Este concepto de inteligencia es un concepto sumamente egoísta de la misma. Yo tengo la suerte por azar de ser más inteligente que tú, es mía, de mi propiedad, mi propia inteligencia, y yo hago lo que quiero con ella, la puedo emplear para beneficiar a la humanidad o para beneficiarme a mí mismo.

Bien, esto no es cierto tal como se plantea en el  párrafo anterior. Primero, aunque fuera como se acaba de decir, el contra argumento sería: lo que se recibe gratis, se da gratis. Tú no has hecho nada, no has aportado previamente nada para nacer con esa inteligencia, luego deberías aportarla de la misma manera a la sociedad. Esto es válido para todos los dones, no solamente en los referentes a la inteligencia.

Pero es más. Nadie puede reclamar que su inteligencia es exclusivamente suya. Lo argumento. Primero, es genética, luego se la debes a tus padres, a tus abuelos, a tu árbol genealógico en general, al proceso de tu embarazo, a la naturaleza, a la temperatura durante tu desarrollo en el útero, etc.  Y luego. Todo lo demás , todo lo que aprendes, estudias, desarrollas, practicas, sí claro, es por voluntad tuya y con tu esfuerzo, pero también el esfuerzo de las profesoras que te enseñaron, de los sabios en todas las disciplinas que investigaron, escribieron, pintaron, diseñaron, construyeron, filosofaron antes que tú, que tú has estudiado y que de los que has aprendido. Sí, claro, tú sacas tus propias conclusiones y generas cosas nuevas que no existían. Precisamente. Esa es tu parte. Y ese es tu aporte a la humanidad, a lo que debería ser la Inteligencia Colectiva.

La Inteligencia Colectiva podría definirse como la inteligencia de un grupo más o menos grande en la que cada uno a porta “su” inteligencia, sea grande o pequeña, sus habilidades, sus dones, para trabajar de manera conjunta, todas a una, con el fin de obtener un resultado que será el aporte de todas y el mérito de nadie sino del grupo.

Claro, existen líderes naturales. Los más inteligentes, que, seguramente, aporten la mayoría o las mejores ideas. Pero también hay otros dones y disciplinas muy necesarias sin las que, en conjunto, el grupo no sería capaz de llevar ningún proyecto a cabo.

Y hablo de líderes naturales, no impuestos tal como nos tiene acostumbrada la estructura social jerárquica en todos los ámbitos, familiar, laboral, social y político, de la civilización actual. Líder natural es, por ejemplo, aquel buen matemático que es reconocido por la comunidad por su habilidad con tal disciplina y es estudiado y sus ideas son reconocidas y utilizadas por todo el mundo. Y líder impuesto es aquel presidente de la Academia de Matemáticas que es nombrado a dedo por ser el hijo del Ministro de Cultura, que no es capaz ni hábil para desarrollar su puesto, pero que como tiene una alta posición jerárquica, despedirá o hará la vida imposible a todo aquel o aquella que osen desafiar su autoridad, su cargo y sus supuestos conocimientos. Es decir, este líder antinatural, que son todos los actuales, se impone como líder utilizando la amenaza y la violencia, tal como hacen todas las leyes y líderes, sobre todo políticos, en la civilización actual.

Un líder natural no necesita usar la violencia porque sus por sus propios méritos es reconocido por la comunidad, sin embargo un no-líder, líder falso o antinatural, necesita imponer su falso liderazgo ejerciendo la violencia, ya que nadie les haría caso de otra manera, debido a su incapacidad y falta de reconocimiento por parte de la comunidad. Esto son todas las empresas públicas y privadas en la actualidad, todos los sistemas políticos y sociales.

Es decir, combinando Inteligencia Colectiva y Horizontalidad, el problema no es en sí mismo La Tiranía de los Imbéciles, sino más bien que los sistemas jerárquicos de cualquier orden y ámbito son antinaturales y, de por sí, facilitan el aupamiento de líderes antinaturales que se tienen que imponer necesariamente por la violencia, de manera coercitiva, ya sea legal, judicial, policial, laboral o de otro ámbito. Todos los sistemas humanos de esta civilización funcionan, en la actualidad, por desgracia, así. Es decir, de manera antinatural contraria en sí misma lo más auténtico ontológicamente hablando del ser humano. Esto, realmente, es lo que se llama Patriarcado. Es la base y el leitmotiv más último, el primero, de los sistemas patriarcales, que son todas las sociedades que ha habido y hay hasta ahora: la dominación.

Luego el sistema natural de funcionamiento para construir sociedades realmente humanas y no anti-humanas, es el horizontal asambleario, en el que las decisiones se tomen por consenso, sólo se votaría en casos de extremo desacuerdo, y cuyo motor principal sea la inteligencia colectiva, entendida como el aporte por parte de los individuos de sus dones  a la sociedad, no sólo los tradicionalmente entendidos en el ámbito de la inteligencia, sino de todo tipo, todos los dones, y guiados y aconsejados por los líderes naturales, de manera no dominante, no coercitiva, sino, por el contrario, de manera dialogante, cooperativa, mediante la compartición, el debate y el consenso.

Este modelo es completamente escalable a cualquier ámbito, mediante el conocido sistema organizativo de asambleas en red y asambleas representativas de mayor ámbito que el local, en los sucesivos niveles que fuera necesario desarrollar. Es perfectamente posible organizar no sólo un país, sino todo un planeta de esta manera. Lo que nos debería parecer imposible es que el mundo esté organizado de la manera que está: estructuras jerárquicas antihumanas, patriarcales, estructuras de opresión y dominación, en las que líderes estúpidos emplean la violencia de uno u otro signo sobre la población con el único fin de mantenerse en el poder a toda costa. Esto sí que es aberrante  y anti-humano y requiere infinitamente más esfuerzo, gasto y trabajo para mantenerlo funcionando que un sistema asambleario en red mundial, ya que tienes que estar todo el rato y constantemente obligando a todo el mundo a hacer todas las cosas de manera antinatural y absurda. Es como comprarse un Ferrari e ir todo el rato marcha atrás. Mejor, hacia adelante y en sexta. ¿No?

En una organización asamblearia en red mundial regida por la inteligencia colectiva, el consenso y los líderes naturales, no habría que obligar a casi nadie a hacer casi nada, todo el trabajo a desarrollar sería fruto de acuerdos y las normas a cumplir también, con lo cual el “gasto energético” de este tipo de sociedades es infinitamente menor que el de las jerárquicas, son infinitamente más óptimas. Si bien es más costoso el proceso inicial de debate de propuestas y toma de decisiones por consenso, una vez llegados los acuerdos, como son el resultado de un debate, una negociación y cesión mutuas, al llegar a dicho consenso, todos están de acuerdo con la decisión, por eso se llama consenso, y todos se ponen a trabajar en pro de esa decisión y esos objetivos, sin gente a la contra ni resistencias durante el proceso de desarrollo e implantación del resultado de las propuestas.

Y la gente tendería naturalmente a acatar las normas puesto que no son impuestas sino fruto de la inteligencia colectiva, el sentido común y el consenso, acordadas y negociadas entre todas y todos. Y, por supuesto, revisables.

El resultado, además, es que las normas que rigieran este tipo de sociedades no serían prohibitivas ni punitivas, sino más bien propositivas y recompensantes, premiarían. En lugar de decir lo que NO tienes que hacer y castigarte cuando lo haces, te dirían lo que SÍ tienes que hacer y te premiarían individual y colectivamente por hacerlo. Sería pasar de sociedades infantiles, basadas en la obligación y el castigo, a sociedades adultas, basadas en la responsabilidad personal y colectiva, la confianza en los otros de que cumplen con su cometido y el reconocimiento del esfuerzo. El premio sería disfrutar todas y todos de unas sociedades articuladas a la medida de las personas. El premio, simplemente, sería La Felicidad.

Es pasar de las sociedades de la negación a la sociedad de la afirmación. De las sociedades del NO, todas las actuales, a la sociedad del SÍ. Estamos justo en ese momento evolutivo. Estamos pasando del ser humano que se niega a sí mismo y a su naturaleza y se atormenta con sociedades represivas, al ser humano, a la humanidad que se acepta a sí misma y a su naturaleza, biológica y espiritual y se premia construyendo y viviendo en sociedades propositivas, positivas, afirmativas. Las sociedades del SÍ. Es pasar del infierno al Cielo. Literalmente. Es crear y disfrutar El Paraíso.

De las sociedades de la infelicidad a las sociedades de la Felicidad.

De la era de la oscuridad a la plenitud de la luz. La luz del conocimiento y la inteligencia colectivas. La luz del verdadero ser humano, de la auténtica humanidad, la luz del Bien.

Más que normas que obedecer o leyes serían reglas de funcionamiento. Crecer, construir, cooperar frente a obedecer y competir. Construir en lugar de destruir. Se consiguen sociedades tendentes a la cooperación, la construcción y la libertad y evolución humanas en lugar de las actuales, tendentes a la competencia, a la destrucción, la esclavitud y la involución humanas.

Es un sistema muchísimo más óptimo, a medio y largo plazo, que los sistemas jerárquicos. Exponencialmente más óptimo que los sistemas jerárquicos.

En este tipo de sociedades el concepto de libertad, entendido en sentido amplio, sería lo que tendrían y practicarían los ciudadanos, las personas, en este tipo de sistemas. También el empoderamiento, porque son ellas y ellos mismos los que toman las decisiones y hacen las cosas. No vienen órdenes de fuera, diseñadas mucho antes del nacimiento de esas personas concretas y que no han contado para nada con la opinión de cada una y uno que tienen que acatar esas normas.

Jerarquía->Líderes Estúpidos->Imposición de normas y el trabajo a hacer mediante la violencia->Injusticia Estrucural->Infelicidad Generalizada

Asamblea->Líderes Naturales->Inteligencia Colectiva y consenso->Todas y todos trabajan en pro al haber consensuado libremente la labor a hacer y las normas a acatar->Justicia Estructural->Felicidad Generalizada y Duradera

Este tipo de funcionamiento asambleario en red facilita la construcción de sociedades mucho más justas, más tendentes a dinámicas de funcionamiento cooperativo internamente y entre sí, más libres y con gente mucho más empoderada. Lo uno lleva a lo otro: tomar el control de la gestión de tu vida en sentido individual y colectivo es lo que se podría llamar, desde el punto de vista sociológico, libertad: la capacidad de gestión de tu propia vida, como persona, y la capacidad de gestión de la sociedad, como personas.

Sociedades carentes casi por completo de sistemas coercitivos o represivos por su propia naturaleza de funcionamiento.

Al fin y al cabo, no sociedades más humanas, sino, más bien, sociedades humanas, porque la civilización actual lo único que ha construido son sociedades anti-humanas en las que es muy, muy difícil vivir incluso ya hasta cumpliendo las reglas, precisamente porque no son sociedades diseñadas para el ser humano, sino contra él.

Asamblea, Inteligencia Colectiva y Líderes, Lideresas Naturales, eso es lo humano. Lo otro, no.

adoranser

La Inteligencia Colectiva frente a la Tiranía de los Imbéciles

La Tiranía de los Imbéciles

El otro día una amiga mía me hablaba de que es necesario prohibir las pruebas cosméticas en animales, simplemente por un poquito de humanidad, para no hacerles sufrir ni sacrificarles innecesariamente. Y tiene razón. Pero yo fui más allá. Le dije que lo que habría que suprimir sería la industria cosmética y los cosméticos en sí mismos.

Vivimos en una sociedad en la que no es que importe más la imagen que el fondo, sino que hemos llegado al extremo de que sólo importa la imagen.

Precisamente esta hipertrofiada súper valoración de la imagen per sé ha hecho posible que nos gobiernen los idiotas, los imbéciles, los políticamente correctos. Si queremos gobiernos de gente inteligente tenemos que romper el rol mental de la imagen híper valorada en la sociedad actual y del discurso educado y políticamente correcto. Las verdades duelen y hay que decirlas sin educación ninguna. La gente inteligente siempre ha tenido un carácter fuerte y tienen discursos que se desprecian por no ser políticamente correctos y tanto por su carácter como por la manera de decir la verdad, la gente inteligente, en una sociedad en lo que lo único importante es la imagen, es relegada y despreciada y esta misma sociedad híper superficial aúpa a los imbéciles con admiración y fruicción, educados, políticamente correctos y con buena imagen, convirtiéndose en Los Imbéciles que rigen nuestra sociedad, tanto en empresas públicas como privadas y gobiernos: son los jefes de cualquier nivel, responsables de área, directores, C-Level, diputados, presidentes, etc. Son Imbéciles.

Entonces hemos llegado a la sociedad actual: La Tiranía de los Imbéciles. Una vez aupados a sus inmerecidos puestos de responsabilidad, a base de buena imagen y discursos políticamente correctos y a base de relegar y ningunear a la gente realmente Inteligente y Capaz, como se saben incapaces de desempeñar sus funciones, porque son Imbéciles Incapaces, pues entonces se convierten en auténticos tiranos eliminando a toda gente Inteligente y Capaz a su alrededor para no tener competencia y que no les desplacen, incluyendo sus subordinados. Entonces, con el tiempo, la cosa empeora sensiblemente, porque al final, no sólo cualquier puesto de responsabilidad está ocupado por un Imbécil, sino que, finalmente, toda la empresa pública, privada o gobierno está formado en exclusiva por Imbéciles Incapaces. Se ha establecido entonces La Tiranía Total de los Imbéciles en dicha empresa, organismo o gobierno, y la empresa, organismo o país se van a la mierda, al garete por la incompetencia endémica y superlativa de Los Imbéciles.

Esto es lo que está pasando en la actualidad. Sobre todo desde hace unos quince años a esta parte. Se ha implantado totalmente La Tiranía de los Imbéciles. Y los Inteligentes y Capaces son relegados, ninguneados, despreciados, argumentando malas formas y discurso políticamente incorrecto, así como carácter fuerte. Pero las cosas no funcionan por imagen ni por discurso  políticamente correcto, sino por el fundamento de sus reglas, sus paradigmas, su desarrollo y sus consecuencias y para manejar todo esto, para manejar sociedades, países, empresas y civilizaciones, tenemos, necesariamente, que aupar como sea a gente Inteligente y Capaz a los puestos de responsabilidad.

En todos los ámbitos. En todas las funciones. En todos los sitios. Gente Inteligente y Capaz que NO tiene buena imagen, que NO tiene un discurso políticamente correcto, que tienen mal genio y se les hinchan los cojones de vez en cuando y que pegan puñetazos en la mesa cuando es necesario. Eso sí, a la inteligencia máxima suele ir asociada una estricta y rigurosa ética hasta con ellos mismos, y los hinchamientos de pelotas y puñetazos en la mesa suelen ser ante las injusticias  y los errores, entre ellas, la máxima injusticia: que Los Imbéciles Incapaces nos gobiernen y no ellos, los Inteligentes Capaces. Y entre ellos, los errores, los errores técnicos y de procedimiento de Los Imbéciles. Porque mira que son Imbéciles.

Porque, estos Imbéciles Incapaces nos están llevando a todas y a todos al desastre y la aniquilación (del latín nihil, nada, significa, literalmente, reducir a la nada) y hay que sacarles ya, urgentemente, de todo puesto de responsabilidad, de todo mando, ya sea en empresa pública, privada o gobierno de cualquier tipo. Los Imbéciles al final acabarán con todas y todos nosotros, incluídos ellos mismos, porque son realmente Imbéciles y totalmente Incapaces. Y cada vez más, en mayor medida, por el Principio de Desplazamiento del Capaz que rige La Tiranía de los Imbéciles, en todos los sitios, en todos los ámbitos, los que ejercen cualquier tipo de labor acaban siendo todos Imbéciles porque desplazan a los Capaces de manera sistemática y enfermiza.

Hay otra característica de Los Imbéciles que les permite desplazar a Los Capaces sin el más mínimo atisbo de remordimiento de conciencia: no tienen ética ninguna, cero empatía, su egoísmo es máximo y exacerbado y, así, se configuran como Imbéciles, Incapaces y Antiempáticos, justo las antípodas de Los Capaces, que son Inteligentes, Hábiles y Ultraempáticos, con lo cual, suceden dos cosas. Primero, Los Capaces, al ser tan empáticos, sienten el sufrimiento de los demás y no tienen más remedio que tratar de evitarlo, luego si tienen responsabilidades de cualquier tipo es seguro que ejercerán el cargo en beneficio de todas y todos. Y segundo. Al darse esta circunstancia, la ultra-empatía, Los Capaces tienen serios remordimientos de conciencia cuando desplazan o quitan del sitio que no le corresponde a uno de estos Imbéciles Incapaces. O incluso cuando, simplemente, tienen que defenderse de uno de ellos. Eso hace, por la parte de Los Capaces, que Los Imbéciles les estén aniquilando. El «sistema inmunológico» Capaz no está funcionando adecuadamente.

Ha llegado el momento de que Los Capaces dejen a un lado sus conciencias, su ética y su empatía para con los Imbéciles, aplasten de una vez por todas a estos Incapaces Egoístas, y Malvados en realidad, porque eso es ser malvado, malo: que sólo te importes tú. Ha llegado el momento, porque es que, oyes, esta Tiranía de los Imbéciles nos está aniquilando a todas y a todos, tanto en sentido individual como colectivo.

Insisto, hay que acabar con los roles mentales de la buena imagen y el discurso políticamente correcto, ya que esas son las armas de Los Imbéciles para medrar, y es lo que les ha permitido auparse en todos los puestos de responsabilidad de esta sociedad en todos los ámbitos.

Hay que reclamar, más bien, con extrema urgencia y necesidad, lo Políticamente Incorrecto, las palabras y maneras de decir las cosas de manera malsonante, pero que sean auténticas, que sean verdad. Hay que reclamar también La Mala Imagen, porque el discurso Políticamente Incorrecto y la Mala Imagen son propias en inherentes a la gente Inteligente, Capaz, Hábil y Empática, porque estas cosas, el discurso Políticamente Incorrecto y la Mala Imagen dicen una de las cosas que más aman Los Inteligentes y Capaces: La Verdad. Y también dicen la otra cosa que más aman Los Inteligentes y Capaces: La Justicia. Y también, en cuanto a la Empatía, la tercera cosa que más aman Los Capaces: a La Humanidad.

Imbéciles, rendíos, vuestra Tiranía ha acabado… Llegan Los Capaces.

 adoranser

La Tiranía de los Imbéciles

Del miedo, la manipulación y La Libertad

El otro día me comentaba una amiga que cómo engañaba y manipulaba a la pobre gente un orador de determinado partido político, negando la realidad evidente de lo que está sucediendo en España.

Reflexionando sobre ello, me decido a escribir las siguientes líneas.

Sí, sí, los manipuladores y mentirosos son malos malísimos y odiosos, es verdad, pero también es verdad que no es el único agente de las enfermedades sociales y políticas que aquejan al planeta y, en concreto, a este país.

El problema también es que la gente se lo cree. El manipulador no puede manipular si no cuenta con el consentimiento del manipulado. La gente tiene su parte de responsabilidad, una gran parte, en el proceso de progreso y éxito de la manipulación. Es más, muchas veces, cuando les cuentas la verdad, van y no te creen y eligen creer sólo al manipulador. Incluso, muchas veces, aún más allá, te rechazan con violencia y furia cuando les cuentas la verdad, practicando el viejo vicio de matar al mensajero, adornado en estos tiempos con el vicio complementario de adorar al manipulador.

La gente es responsable de sus actos, mucho más de lo que ellos mismos quieren asumir y también mucho más de lo que pensamos nosotros y nosotras.

La gente tiene mucha más libertad de la que ellos mismos quieren creer que tienen. Mucha gente se niega en redondo a ejercer su libertad y elige con fruicción al manipulador que le dice que no la tiene, a sabiendas de que eso es mentira, porque tienen miedo-pánico a ejercer su propia libertad.

Mucha, muchísima gente prefiere auto-engañarse pensando que no tienen libertad ni capacidad y que necesitan un salvador o salvadores que les muestren la luz, el camino, e, incluso, que hagan las cosas por ellos, o, al menos, que les digan detalladamente lo que tienen que hacer.

Es auto-engaño, porque esa gente renuncia voluntariamente en su interior a ser conscientes de la gran libertad que tienen para gestionar su vida, o luchar por gestionarla y conseguirlo, de las grandes capacidades que tienen para llevarlo a cabo y en lugar de eso, por miedos irracionales, eligen enterrar sus talentos no vaya a ser que el dueño de la hacienda se cabree porque los ha empleado mal y los ha despilfarrado. Miedo.

Mucha, muchísima gente en este país, a lo que más pánico le tiene es a tener que gestionar su propia vida, a tomar sus propias decisiones, a ejercer su libertad y poner a rendir sus capacidades, sus talentos, porque tienen un miedo ancestral e irracional a equivocarse, y ese miedo al error, al fracaso, es lo que les lleva a la inacción y a dejarse manipular por el primero que les hace un poco de gracia. No se dan cuenta de que el mayor error, el mayor fracaso es, precisamente ese: renunciar interiormente voluntariamente a su libertad y a ejercer sus capacidades y dejarles que otros les guíen, muchas veces manipuladores sin escrúpulos.

El mayor error es no hacer nada, el mayor fracaso es la inacción, es enterrar tus talentos y no ponerlos a producir, es renunciar voluntariamente a tu propia libertad. El hacer cosas y ponerse en marcha, el tomar tus propias decisiones, es un éxito ya en sí mismo, aunque te equivoques y la cagues, aunque aparentemente fracases, porque, si tienes esa dinámica, esa manera de afrontar la vida, que es ejercer tu libertad y tomar tus propias decisiones, aún del peor de los fracasos, aún del más grande de tus errores serás capaz de recuperarte y llegar a tener incluso más éxito de lo que pretendiste en un principio.

Manipuladores, mentirosos, interesados, políticos siempre va a haber. Pero nada solucionaríamos erradicándolos a todos si eso no fuera acompañado de una nueva actitud general de las personas de asumir su propia libertad y gestionar su propio destino confiando en y utilizando sus propias capacidades, porque, al poco tiempo, volverían a aparecer otros que harían lo mismo.

Al igual que poco ganamos al esterilizar completamente un ambiente si nuestro sistema inmunológico es deficiente. No se trata de eliminar todos los virus y bacterias del universo, porque virus y bacterias siempre va a haber, sino, más bien, de tener sistemas inmunológicos sociales y políticos que nos permitan llevar a cabo una verdadera democracia en libertad aún con la existencia de gente interesada, corrupta, malvada, manipuladora.

Al igual que nuestro sistema inmunológico biológico deja inoperantes a tantos virus y bacterias que nos atacan todos los días, y nosotros ni siquiera nos enteramos, al igual deberíamos formar sociedades en las que económica, política y sociológicamente, estos manipuladores sin escrúpulos que actualmente campan a sus anchas por el espacio político, quedaran totalmente inoperantes, sin efecto, sin poder ninguno, sin capacidad de hacer daño por el efecto de una sociedad inmunizada contra ellos, una sociedad culta, bien formada, con recursos mentales e intelectuales adecuados, pero, sobre todo, sin miedo, sin miedo, sin miedo, que, al fin y al cabo, no es más que una consecuencia, el vivir sin miedo, del desarrollo de lo que propongo.

La libertad se puede entender como la capacidad más o menos grande que tienes para gestionar tu propio destino pero también como la actitud conducente a maximizar esa capacidad de gestión de tu destino, de autogestión de nuestros destinos, de manera individual y colectiva simultáneamente, porque todas y todos dependemos de todas y todos. Esto es muy importante que lo recordemos. La libertad entendida de manera exclusivamente individual es egoísmo, y la libertad entendida de manera exclusivamente colectiva es alienación. La libertad es A LA VEZ un concepto, una actitud, una praxis que debe ser desarrollada de manera conjunta y coherente en el plano individual y en el plano colectivo.

El plano individual y el colectivo de la libertad son dos planos complementarios, necesarios y que tienen una relación de dependencia el uno del otro que no se puede suprimir. No existen la libertad individual ó la libertan colectiva. Existe la libertad individual y la libertad colectiva. Juntas e inseparables de manera que son una misma cosa: la libertad. Es absurdo y ontológicamente aberrante contraponer conceptos que son, necesariamente, complementarios. Eso sí que es manipular, crear la lucha inexistente entre libertad individual y colectiva. Inexistente porque la libertad desarollada exclusivamete en cualquiera de esos dos planos se convierte automáticamente en esclavitud, de distinto signo y contenido, con distintos amos, pero esclavitud, al fin y al cabo, luego no se puede considerar que ninguna de las dos por separado puedan llamarse, puedan alcanzar la categoría de libertad. La libertad sólo es y existe si es simultáneamente individual y colectiva.

Y, realmente, el único enemigo que tiene la libertad es el miedo. Realmente, el único enemigo que tiene el ser humano es el miedo, normalmente el miedo a sí mismo y/o a los miedos que lleva impregnados, que no impresos, en su interior.

El día que nazca un ser humano sin miedo, ese día habrá nacido Dios, porque ese ser humano será capaz de hacer cualquier cosa en el sentido más amplio de la expresión.

Sin miedo.

adoranser

Del miedo, la manipulación y La Libertad