Varoufakis es como Jesucristo: ha muerto «crucificado» traicionado por Judas, digooo, Txipras, vendido por 30 monedas, digoooo, por conservar su cargo, ha descendido al infierno de ver cómo la Troika aniquila su país, pero ha resucitado, proponiéndonos a todas y todos el Plan B.
A ver si resucitamos nosotras y nosotros también llevándolo a cabo entre todas y todos. El Plan B, la única esperanza de Europa para luchar contra el fascismo. La Rebelión Democrática de los Pueblos de Europa se ha iniciado. La Esperanza Rebelde ha nacido. ¡El Plan B ya estáaaa aquíiiiii!
Yo, es que soy como un niño grande, no en sentido peyorativo, sino, más bien, en que creo que tengo una gran capacidad de conservar la ilusión, pase lo que pase y que creo, muchas veces, que, hasta lo más imposible, es posible.
Como los niños…
Lo de que «el que no sea como un niño no podrá entrar en el reino de los cielos» no quiere decir que haya que ser idiota para entrar (o asaltar) el cielo, sino, más bien, en que hay que ser como un niño para creer que existe el cielo.
Porque si no crees que pueda existir el cielo, ergo una futura sociedad justa y humana, nunca vas a luchar por conseguirla, y, si la consiguieras, como no crees en ese cielo, aunque estés viviviendo en ella, ni siquiera te darás cuenta, no serás consciente de ello.
No existe el infierno. Como decía el otro. El infierno, somos nosotros mismos.
Es decir, la definición de un niño, de una niña, es un ser que tiene esperanza infinita, ilusión infinita, energía infinita, empatía infinita, que siempre espera lo mejor, pase lo que pase, y que lo único que quiere es querer y que le quieran, porque lo único que quiere es ser feliz.
Ojalá todas y todos volviéramos a nuestra niña y a nuestro niño originario, antes de cualquier trauma, antes de cualquier daño.
Volver mentalmente, interiormente. Porque si cada ser de este planeta volviera a revivir su niña interior antes de cualquier trauma, hasta Rajoy y hasta el sicópata más terrible, se volverían buenos, porque todas las niñas y todos los niños, sin excepción, son buenos.
Eso, así de fácil y de difícil, eso es el Cielo.
Simplificado: la definición de un niño o de una niña es que son puro sentimiento. Son puro Amor. Son todo, y prácticamente, nada más que Amor. Dicen que Dios es Amor. A ver si resulta, que, al final, va a ser verdad.
Y aquí se resume todo lo que es perdonar, el Amor, Dios, el cielo, las historias de todas las religiones, todas sus leyes, profetas, etc. y hasta de algunas filosofías. Las religiones originarias, no las estructuras desarrolladas después. Si es que es muy fácil todo. Yo creo que Dios, más que cabreado con nosotros, está desesperado, porque, por desgracia, creo que, como Humanidad, no nos enteramos de nada y no le damos importancia a lo único importante: el Amor, ergo, la Felicidad.
Esto que digo creo que, salvando las distancias, o no, creo que suena muy ecofeminista.
Creo, no quiero pecar de arrogante en esta valoración, pero creo que suena muy ecofeminista y Dios, si es que existe, que yo creo que sí, nadie es perfecto, y Dios de existir, es mujer.
Y además, como es Dios y hace lo que le da la gana, va a sus propias capillas en sujetador.
Más precisión: Dios, de existir, es mujer y es ecofeminista.
Aparte de valoraciones, pensamientos más o menos profundos e hipótesis más o menos razonables, fijaros lo cazurros y machistas que son los católicos de este país: tienen, en todas sus iglesias, como a lo máximo que adoran, a un tío colgado de la pared en calzoncillos y se escandalizan porque una mujer entre en una capilla en sujetador. ¿Os dáis cuenta de la ceguera total y brutal de todos y cada uno de los católicos de este país? Alucinante.
Si juzgan a Rita Maestre por entrar en una capilla en sujetador, entonces, también tienen que juzgar a Jesucristo por estar miles de años en las capillas de todo el mundo en calzoncillos. ¿Eso es lo justo, no?
¡Ah!, ¡No me acordaba! ¡Si ya lo juzgaron y lo crucificaron! Joer, me falla la memoria últimamente…
Como decía… Igual que a Varoufakis.
adoranser